Mi Pasión por la Aviación
Hola, mi nombre es Andrea Balderrama y me encantaría compartir con ustedes mi pasión por la aviación. Todo comenzó cuando apenas era una pequeña niña que estaba apunto de viajar por primera vez en un avión. ¡Fueron tantas emociones! Estaba muy nerviosa y ansiosa, no veía la hora de emprender el vuelo.
Aún recuerdo cuando ingresé a la aeronave y me recibió con una gran sonrisa la jefa de cabina. Mis padres me llevaron a la fila de asientos que habían reservado; de inmediato salté y me adueñe del que estaba junto a la ventanilla.
Recuerdo la voz del capitán al dar su anuncio y avisarnos que estábamos próximos al despegue. Yo ya no podía contener y esconder tanta alegría. Escuché el acelerar de los motores y como empezamos a ganar velocidad. ¡Vamos rapidísimo! -pensé.
Cuando despegamos sentí algo inexplicable, tanta paz y felicidad, ¡Estoy volando!
No podía dejar de contemplar los paisajes que se asomaban por la ventanilla. Ver las nubes, el atardecer, la aproximación y la hermosa vista quedaron grabados para siempre en mi mente. Esa sensación de estar en libertad, solo yo y el cielo. En ese momento despertó en mi el interés hacia la aviación.
Tuve suerte de compartir el sueño de volar con mi hermana mayor, quien en su momento fue mi inspiración y modelo a seguir cuando se volvió sobrecargo. Me fascinaba cuando ella llegaba de vuelo y me contaba todas las anécdotas de sus viajes. Ella me demostró que era posible llegar a la meta de volar. No podía esperar para tener la edad suficiente y estudiar lo que tanto me apasionaba.
Gracias al apoyo de mis padres y a los consejos y mentoría de mi hermana puedo decir con gran orgullo que cumplí mi sueño de ser sobrecargo de aviación.
El mundo de la aviación es enorme e intrigante. Cada día es una experiencia distinta; nunca caes en la rutina ya que vas a lugares diferentes con compañeros y pasajeros nuevos. Además que las vistas, amaneceres y atardeceres no tienen igual y constantemente te enamoras de cada uno de ellos.
Estoy por cumplir 4 años volando y puedo asegurar que no hay mayor felicidad que dedicarse a lo que tanto te apasiona.
Escrito por Andrea Balderrama